Donostia
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94 342 83 41
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¿Te imaginas un lifting facial pero sin cirugía? Gracias a la revolucionaria técnica de los hilos tensores es posible.
La flacidez facial es una consecuencia del paso de los años en nuestra piel. Supone una gran preocupación para muchos hombres y mujeres que quieren mantener un aspecto jovial.
La pérdida de elasticidad en la piel, a causa de la destrucción de colágeno y elastina se traduce en flacidez facial y en la aparición de arrugas y líneas de expresión que se irá acentuando con el paso del tiempo.
La medicina estética ofrece numerosas soluciones de rejuvenecimiento facial muy eficaces. Una de ellas es el tratamiento con hilos tensores.
¿Qué son los hilos tensores?
Los hilos tensores o hilos mágicos son pequeños filamentos súper finos fabricados con materiales biocompatibles y reabsorbibles por nuestro propio organismo. Son totalmente seguros y permiten efectuar retoques tras su aplicación en el caso de que fuera necesario.
¿Cómo funciona este tratamiento?
Los hilos tensores nos ayudan a tensar y recolocar de nuevo nuestra piel que se ha ido descolgando con la edad. Proporcionando a nuestro rostro una mayor firmeza.
El resultado es un lifting facial sin cirugía, logrando disminuir la flacidez y recuperando la elasticidad en nuestra piel. El resultado final será una piel mucho más suave, luminosa y sobre todo rejuvenecida.
Este tratamiento es recomendable para hombres y mujeres que deseen revertir los primeros signos de envejecimiento en su piel cómo los surcos demasiado profundos o las arrugas y líneas de expresión.
¿ En qué consiste el tratamiento?
Los hilos tensores o hilos mágicos son aplicados a nivel intradérmico con una aguja muy fina en nuestra piel. Una vez colocado el hilo en la parte del rostro, se retira la aguja.
El número de hilos que se introduzcan en cada tratamiento dependerá de la extensión de la zona que se pretenda intervenir. Habitualmente la cantidad más frecuente para los tratamientos faciales suele ser entre 5 y 15 hilos tensores.
Es un tratamiento que no necesita ninguna sutura, lo que hace que sea un método rápido y sencillo. La duración aproximada del tratamiento oscila entre los 20 y 30 minutos y es un proceso indoloro. Se puede retomar sin complicación la vida normal ya que los efectos secundarios son prácticamente inexistentes, tan sólo puede aparecer hinchazón o molestia durante unos días.
Los hilos tensores están recomendados especialmente para corregir la flacidez facial (elevación de mejillas, recuperación del óvalo facial, mejora de surcos nasogenianos, arrugas del contorno de ojos y elevación de cejas…).
Si quieres más información sobre este tratamiento no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
